Oscar Cantón, sí aspira a gobernar
Sin Remitnte
Víctor Ulín/
En un ejercicio de transparencia y honestidad, Óscar Cantón Zetina es el primero en aceptar que tiene aspiraciones de gobernar Tabasco.
Un profesional de la política, el ex senador, ex diputado local y ahora en su tercera participación como diputado federal, el político tabasqueño es, en efecto, uno de los activos más importantes de Morena para retener la gubernatura sin ningún problema en la elección del 2024, cada vez más cerca.
En Tabasco la gran mayoría sabe de su trayectoria política y de lo mucho que ha contribuido desde sus diversos encargos al progreso del Estado y bienestar de su población.
Hoy, desde la Cámara de Diputados, es una de las voces más autorizadas y uno de los más activos protagonistas que ha hecho suyo también el proyecto de transformación en el país que ha venido impulsando el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En Campeche, donde tuvo la responsabilidad de sacar adelante la elección como delegado nacional de Morena en el proceso electoral del 2021, demostró su experiencia político electoral para superar con creces al PRI y ganarle en su feudo al mismo dirigente Alejandro Moreno Cárdenas que vió truncada su ambición de imponer a su sobrino en la gubernatura.
En Oaxaca, donde le han delegado también la alta responsabilidad de la elección del próximo año, no hay que dudar que también será factor para que el candidato a gobernador de Morena que sea electo le gane al PRI y acabe por fin con su hegemonía.
El presidente Andrés Manuel López Obrador y el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, encontraron en Óscar Cantón Zetina a un confiable y destacado militante para continuar consolidando en el país el proyecto de Transformación que ha sentado sus bases en estos primeros tres años de gobierno.
Como un soldado más, Óscar Cantón ha aceptado con humildad las encomiendas y ofrecido buenos resultados, sin más afán que el de aportar a la construcción de un mejor país y en especial al proyecto de nación del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hoy, pues, de cara al pueblo, en un gesto de genuina franqueza, no oculta su aspiración ni tampoco su sueño: gobernar su estado.
