Cambiar a dirigentes morenistas
Víctor Ulín/
La reciente visita a Tabasco de la secretaria general de Morena, Citlali Hernández Mora, para validar la conformación de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación que impulsan los fundadores que lidera Javier May Rodríguez, evidenció que la dirigente formal del partido en Tabasco, Tey Mollinedo, y Raúl Ojeda Zubieta, en su condición de presidente del Consejo, quedaron rebasados y ya no son garantía ni de unidad ni interlocución.
Ante la próxima elección y la inoperancia de los actuales que no hacen nada por acercar posiciones entre los grupos al interior, a Morena en Tabasco le urgen dirigentes con autoridad y respeto que sean capaces de conciliar intereses y sentar a la mesa a los liderazgos de los fundadores y neomorenistas vinculados al secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.
Tanto Tey Mollinedo como Raúl Ojeda carecen del reconocimiento moral de los fundadores a los que tampoco han sabido acercarse para resarcir las diferencias que se ahondaron desde la integración del Comité Ejecutivo Estatal (CEN), más allá de que puedan mantener un distanciamiento deliberado.
A los actuales dirigentes, que también son neomorenistas, les ha hecho falta estar a la altura de las exigencias y las circunstancias para lograr armonizar al interior del partido las posturas de los grupos por más confrontados que parezcan estar.
Faltan entre siete u ocho meses para la definición del candidato a gobernador y demás cargos de elección, y tan solo cuatro para la designación del abanderado presidencial, y las posiciones entre los fundadores y neomorenistas parecen irreconciliables y destinadas a un choque de pronóstico reservado.
A estas alturas, es impensable que Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, no tenga en su escritorio un diagnóstico certero -y preocupante- de cómo están las cosas entre sus dirigentes y militantes en Tabasco y la incertidumbre que se cierne ante un eventual choque de trenes que complique el proceso interno de selección de candidatos e incluso el futuro inmediato del partido.
