Labor titánica y sin descanso, el desalojo de aguas en puntos críticos: Adán Augusto
Redacción/
Villahermosa, Tabasco; lunes 02 de noviembre de 2020/
• Supervisa el Gobernador la instalación de equipos de bombeo en colonia Casa Blanca
• Asevera que el Gobierno está haciendo la parte que le corresponde, pero pide a la ciudadanía también actuar con responsabilidad
El gobernador Adán Augusto López Hernández supervisó la instalación de bombas de gran capacidad en tres puntos de Villahermosa considerados como “críticos” por el nivel que alcanzó la inundación provocada por las lluvias históricas que dejó a su paso el Frente Frío número 9, y garantizó que ningún sector poblacional afectado se quedará sin atención.
Durante un recorrido por la colonia Casa Blanca, una de las zonas que hasta este lunes aún permanecían con altos niveles de agua, el mandatario estatal instruyó medidas emergentes para acelerar el desalojo de los acumulados y seguir dando respuesta oportuna a las familias afectadas.
Sostuvo que la prioridad del gobierno en este momento “es atender y tratar de sacar el agua” de las colonias y/o localidades que todavía siguen con problemas de anegación.
López Hernández aseveró que existe un trabajo coordinado y ‘sin descanso’ por parte del Instituto de Protección Civil del Estado (IPCET), la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento (CEAS) y la Dirección Local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para bombear y ‘secar’ los puntos críticos y restablecer cuanto antes su normalidad.
Acompañado de los titulares del IPCET, Jorge Mier y Terán Suárez, y local de la Conagua, Felipe Irineo Pérez, Adán Augusto López dejó claro que el Gobierno está haciendo la parte que le corresponde, pero también pidió a la ciudadanía actuar con responsabilidad.
En ese sentido, recordó que el sábado pasado recorrió la zona de Carrizal y Giraldas, que en ese momento presentaba una inundación de aproximadamente tres metros, en parte porque uno de los cárcamos tuvo que detenerse “por la altura del agua y el peligro de que la energía causara un corto circuito”.
“Fuimos al cárcamo de Tabasco 2000 y resulta que sólo una bomba funcionaba, echamos andar otra bomba y cuando íbamos a echar andar las cuatro restantes, los técnicos de Conagua y CEAS descubrieron que una charnela que sacaba el agua por gravedad no existía, se la habían robado desde hace meses, por lo que en lugar de sacar agua se estaba metiendo el agua del río”, denunció.
Estableció que revertir esa situación implicó una labor titánica, porque a través de buzos se instalaron las placas de acero sustraídas y “ahora (el cárcamo) ya está bombeando a su máxima capacidad y ese sector ya está seco”, pero cuestionó el robo de ese tipo de material con el fin de “venderlo al mejor postor”.
‘No afectar a terceros’
Tras visitar la colonia Casa Blanca, donde se instalaron dos bombas, una con capacidad de desalojo de 1 mil litros por segundo y otra emergente, el jefe del Ejecutivo coincidió con el planteamiento de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), en el sentido de que la inundación pluvial es, en parte, producto de la corrupción que imperó en el anterior régimen.
“Se permitió por las administraciones anteriores que la gente se asentara en los vasos reguladores, se dieron permisos para rellenos indebidos, se abandonó el mantenimiento de los cárcamos, hubo corrupción en los vactors y hay una serie de irregularidades, pero ahora hay que ver para delante y trabajar en medidas preventivas”, advirtió.
Incluso, recordó que hacia mayo de 2017 se ventiló un asunto de corrupción en la asignación de contratos para el servicio de vactors, tras una inundación que se suscitó en Tamulté “durante una época que no era de lluvias, pero que sí se cobró un desazolve de unos drenes que nunca se hizo”.
El Gobernador anticipó que se afinan detalles con la Coordinación Nacional de Protección Civil para presentar hacia el fin de semana próximo un esquema que, aunque no considera apoyos económicos para la reposición de enseres, sí permitirá diseñar infraestructura para que este tipo de emergencias ya no sucedan.
En entrevista dio a conocer que como parte de la atención se instalaron bombas en el fraccionamiento Lagunas y en la colonia Miguel Hidalgo-Las Torres, dos equipos de succión que fueron proporcionados por el Gobierno de la Ciudad de México, en tanto que la bomba establecida en Casa Blanca es un “equipo de Conagua que se pudo recuperar, luego de cuatro años de estar descompuesto”.
Con respecto a las inconformidades registradas este lunes, López Hernández se dijo respetuoso del derecho de los ciudadanos a manifestarse, pero “lo único que pedimos es que no afecten a terceros”.
A su vez, Felipe Irineo confió en que la disminución del potencial de lluvias pronosticado para la entidad, ayudará acelerar los trabajos de desalojo de aguas, e indicó que en diversos puntos de la capital del estado hay bombas de succión instaladas, con capacidades que van desde los 50 litros por segundo hasta los 200 litros por segundo.
El funcionario federal pidió paciencia a la gente, porque es mucho el volumen que se está bombeando, al tiempo que descartó que haya riesgo de desbordamiento de ríos.