No al cobro de estacionamiento en «El Mercado Pino Suárez»
Víctor Ulín/Sin Remitente/Foto TH/
Los locatarios que ayer permitieron el acceso gratuito a lo sclientes que fueron al Mercado Pino Suárez, tienen toda la razón cuando exigen que el gobierno de Evaristo Hernández Cruz no debe cobrar diez pesos por fracción o una hora por cada unidad que aparca en el inmueble.
Los locatarios denunciaron que desde que el alcalde ordenó cobrar por ingresar al estacionamiento la asistencia ha disminuido y, en consecuencia, las ventas se han desplomado.
Para cobrar el estacionamiento, Evaristo Hernández Cruz no consultó a los locatarios y menos a la población que es la que haría uso del inmueble para conocer su opinión. Los regidores del Ayuntamiento también fueron ignorados olímpicamente y desafortunadamente han permanecido, cómplices, callados, sin decir nada.
El argumento de los locatarios para exigir la gratuidad del estacionamiento es simple: el mercado José María Pino Suárez es un edificio público y por tanto no debe lucrarse con el mismo, mucho menos afectando los intereses de quienes ofrecen sus productos y de los visitantes.
Es también absurdo que haya centros comerciales que no cobran por usar el estacionamiento o bien que, por lo menos, ofrecen dos horas gratis para realizar las compras, mientras que para ingresar al estacionamiento de un edificio público como el mercado, construido con nuestros impuestos, el potencial consumidor tenga que pagar.
De origen, sin dejar de señalar la falta de transparencia, el cobro del gobierno del Ayuntamiento de Centro por estacionarse en el interior del inmueble es un exceso, un abuso, un atentado contra la economía de la decena de locatarios que viven, en su mayoría, al día, y que, desesperados, tomaron el control del inmueble para permitir el acceso.
Enviar a los antimotines para desalojar a los locatarios y encarcelar a un grupo, no es la mejor manera de solucionar una justa demanda que necesariamente tiene que ser atendida. Tarde o temprano tendrá su costo político electoral.
Por más justificaciones que pretenda dar, al alcalde de Centro no le asiste la razón y, por tanto, debe dejar de lucrar con un edificio público construido con nuestro dinero.