El llamado de Andy
Víctor Ulín/
Quieran o no muchos, la realidad es que Andrés Manuel López Beltrán (Andy) está convertido en el líder de facto de Morena y su influencia y poder va más allá de su posición como secretario de Organización.
El liderazgo de Andy que durante el gobierno de su padre mantuvo un bajo perfil, no es artificial o surgido de la nada. Aunque no se le veía mucho, es de sobra conocido su trabajo como un eficiente operador político y su ascendencia entre la militancia.
Su reposicionamiento y liderazgo a lo largo y ancho del país con la gira que viene realizando con Luisa María Alcalde Luján, dirigente nacional de Morena, solo está confirmando el trabajo que ha venido haciendo, y por ende corroborando la presencia que mantiene su padre entre la militancia y ciudadanos.
Es el único, de entre todos los dirigentes de Morena y en partido, heredero del capital político y social del ex presidente Andrés Manuel López Obrador, y lo asume.
Por eso lo que diga y haga tiene una amplia repercusiones en la vida pública y política del país, como en su reciente llamado a la unidad que hizo desde Tabasco hace una semana a sus compañeros.
Cuando concluya la gira de trabajo, Andy no será tampoco el mismo. Habrá afianzado su posición no solo como secretario de Organización, sino como el principal referente de Morena rumbo a las elecciones del 2027, y uno de sus principales decisores.
Hay que dar por hecho también, que en su diagnóstico sobre su partido, Andy tendrá igual muy claro quiénes son los enemigos internos que dividen, confrontan y que quisieran reventar a Morena.
En Tabasco, la lectura sobre cómo está su partido y la militancia, y el rol que juegan los grupos políticos al interior, la tiene más que clara, y su respaldo moral y político al gobernador Javier May Rodríguez no deja ninguna duda de quiénes son sus aliados.