Renovación en MC Tabasco
Víctor Ulín/
Para que Movimiento Ciudadano Tabasco mantenga, crezca y amplíe sus posibilidades de convertirse incluso en la segunda fuerza política local, es necesario un cambio en la dirigencia estatal que implique una auténtica renovación y no una extensión del cacicazgo al que se aferran los ex priistas Pedro Jiménez León y Pedro Palomeque Calzada, así como ahora Javier Vargas y su hija Fanny Vargas, con los que el partido venía naufragando, sin registro y con las mismas prácticas del PRI.
Como lo ejemplifican los casi 80 mil tabasqueños que en la pasada elección lo votaron al Senado, lo que hoy es Movimiento Ciudadano Tabasco ha sido por Gerardo Gaudiano Rovirosa y el equipo que lidera con Casilda Ruíz Agustín y Hernán Humberto Pérez Soto, actual delegado nacional, que desde su llegada al partido simplemente lo sacaron del fondo.
Fue evidente que durante la campaña, Pedro Palomeque Calzada, el todavía dirigente estatal que se anotó en la lista de las diputaciones plurinominales sin ningún mérito más que el de ser amigo de Pedro Jiménez León y de la familia Vargas, hizo todo lo posible para que Movimiento Ciudadano perdiera, a saber, por ejemplo : el boicot, solo porque no eran de su agrado o amigos, a candidaturas a diputados en Centro y alcaldías como la de Comalcalco que pudieron sumar votos al partido y ganado más posiciones en el Congreso o en municipios.
Sistemáticamente, Pedro Palomeque se dedicó a lograr que su partido perdiera hasta el registro y nunca le pasó por la mente que Gerardo Gaudiano Rovirosa, candidato al Senado, y la candidata al gobierno, Minés de la Fuente, y hasta Jorge Máynes, abanderado presidencial, lograran una votación histórica que puso a Movimiento Ciudadano Tabasco como protagonista de la elección del 2 de junio.
Los triunfos en las alcaldías de Tacotalpa, Paraíso y Emiliano Zapata también son resultado de la buena campaña que realizaron yendo en contra de la misma dirigencia estatal que se mantuvo distante.
En los dos meses y medio que duró la campaña, a Pedro Palomeque se le vio solo en contadas ocasiones, pero prácticamente estuvo ajeno a lo que vivían los candidatos de Movimiento Ciudadano en Tabasco.
Para Dante Delgado, líder político y moral, la próxima elección de su dirigente estatal representa la real oportunidad de promover un cambio de fondo, de raíz, para que a Movimiento Ciudadano Tabasco lleguen los que, como Gerardo Gaudiano Rovirosa y equipo, demostraron que trabajaron para sacarlo de los últimos lugares y se acabe de una vez por todas con el cacicazgo que solo los había mantenido como un partido satélite, sin mayores posibilidades de crecimiento ni mucho menos de victorias.