IV Informe: gobernabilidad
Columna Guayabera Política/
GUILLERMO HÜBNER DÍAZ/
Se habla –se reconoce-, luego del IV Informe del gobernador Arturo Núñez Jiménez, de “gobernabilidad” –se hace con encomio, por cierto-, como uno de los puntos más significativos del mandato del economista político, autor, catedrático e investigador universitario de 68 años de edad.
Bien que se haga, creo, porque a pesar de las calamidades que ha tenido que enfrentar y superar el actual regimen -heredadas muchas, las más graves de ellas, y creadas otras con fines inconfesables por gente desequilibrada-, la nave tabasqueña ha avanzado en las tempestades sin perder el tumbo dándose como un hecho cierto que amarre en puerto seguro en 2018.
“Gobernabilidad” es eso; el origen del término está en el latín y surge del verbo “gubernare” que equivale a “pilotar un barco”, quien logra la gobernabilidad, entonces, no es una persona cualquiera sino la que toma el timón con firmeza y lo lleva en sus manos, dándole a la nave rumbo definido y por lo tanto seguro.
Es, la gobernabilidad, cualidad de gobernable, o sea de lo que puede gobernarse, añadiría “gobernanza”, término afín, que sería –es- la forma en que se gobierna.
Muchos en Tabasco durante el gobierno del licenciado Arturo Núñez Jiménez, han intentado agarrar al diablo por la cola con el propósito de desestabilizar el estado y provocar su ingobernabilidad, todo intento fracasó por la sensibilidad con que se recogen los reclamos sociales y por la forma en que se atiende a las partes involucradas, trátese de maestros, policías, médicos, transportistas, etcétera.
La oposición, representada por el PRI y el PVEM, principalmente, ha querido poner en juego la gobernabilidad del estado con algunas actitudes intransigentes, necias e impertinentes. A sus promotores les ha faltado cabeza y les ha sobrado mala fe, han querido estos partidos dificultar la gobernabilidad cuando que sus apetencias no van más allá de la defensa de sus propios intereses.
La gobernabilidad en el caso específico del regimen actual, está vinculada al estilo de un gobierno que busca colaboración y entendimiento con todos los actores, no sólo con los políticos o los estatales. Se trata de recomponer un tejido social deshecho y equilibrar dentro de lo posible los intereses tan distintos, encontrados, de una sociedad fracturada y lastimada como quizá ninguna en otra parte del país.
Para eso se requiere andar con decisión y lucidez los caminos necesarios estableciendo lazos de entendimiento y alianzas con fuerzas progresistas que empujen junto con el gobierno hacia el bienestar de poco más de 2 millones de tabasqueños. Se requiere convocar a la suma de esfuerzos para cristalizar un propósito común, el de superar nuestras carencias y elevar el índice de prosperidad de la gente. En eso se ha trabajado con tesón y hay buenos resultados, repito, a pesar de los pesares.
Este año, dijo el gobernador en su discurso, en colaboración respetuosa entre los tres órdenes de gobierno, se han atendido 485 manifestaciones sociales que derivaron en la instalación de numerosas mesas de concertación en las que se asumieron compromisos de atención a diversos asuntos.
Agregamos nosotros que a nadie se le disparó siquiera una carga de gas lacrimógeno ni se agredió a garrotazos a nadie.
El diálogo, la civilidad, la alta política, la que no se siente pero da resultados, se seguirá ejerciendo hasta el final del mandato. La paz social es prioridad y la atención de las necesidades de la gente que estudia, que trabaja, lo mismo en las ciudades que en el campo, está mereciendo todo tipo de apoyos, de orientación, de estímulos, por eso el sector primario de la economía se recupera, la diversificación económica marcha por buen camino y la despetrolización es algo que comparten con entusiasmo y renovado interés miles de coterráneos.
La secretaría de Gobierno ha mantenido su función conciliadora entre los trabajadores y sus patrones. Durante el año participó en la celebración de 1,573 convenios, por los cuales se logró un pago de prestaciones laborales de 16 millones 121,564 pesos, así como en la realización de 219 reuniones inter-sindicales o empresariales para contribuir al arreglo de sus diferencias.
La institucionalidad en la conducción del gobierno estatal no obstante su oposición partidaria respecto del federal, ha sido ejercida plenamente, en el presente año generó condiciones para que el presidente Enrique Peña Nieto visitará hasta en tres ocasiones la entidad.
La nueva correlación de fuerzas reflejada en la Cámara de Diputados, no ha impedido por otra parte que las funciones a su cargo se hayan realizado en condiciones de normalidad democrática, subrayándose la participación responsable de todos los legisladores en este cometido.
Otro tanto podría decirse respecto del Poder Judicial, la estrecha colaboración mantenida con él, condujo a la implementación en tiempo y forma, dentro del plazo constitucional otorgado por el Constituyente Permanente de la Unión, del nuevo Sistema de Justicia Penal.
Hoy, hablamos de la gobernabilidad existente en nuestro amado terruño, Luego hablaremos de otras cosas, de lo mucho que falta y faltará siempre por hacer, sobre todo cuando muchos que deberían de sumarse, prefieren sentarse a la puerta de sus casas a ver pasar la caravana y a contar cuantos caballos cojean o no, en lugar de montarlos, aguantar los reparos y seguir la marcha.
